En 2024, la Agencia Española de Protección de datos sancionó con 27.000 euros a un gimnasio por exigir huellas dactilares para el acceso. Luego, impuso multas de 365.000 euros en otro sector y ahora un millón de euros a la Liga de Fútbol por el uso indebido de datos biométricos. En definitiva, la biometría es una herramienta útil, pero su uso indebido puede acarrear consecuencias graves.
Estar informados y preparados es la mejor estrategia para adaptarse a la regulación y garantizar un entorno seguro y respetuoso con los derechos fundamentales. José Luis Gómez Calvo, analista de riesgos y Experto en seguridad de instalaciones y actividades deportivas nos lo explica. ¡No os lo perdáis!