El gobernador Cuomo anunció la semana pasada la finalización de algunas de las restricciones en los gimnasios. Mientras Florida va viento en popa en su marcha hacia la normalidad gracias a su gobernador DeSantis, que ha mantenido su estado abierto la mayor parte del tiempo.
El gobernador de Nueva York, Cuomo, ha pedido específicamente que se continúe con las medidas de precaución para detener los contagios, como el uso de mascarillas, higiene y distanciamiento social. También ha declarado que la ciudad de Nueva York está trabajando para conseguir reabrir su economía. Considera que por fin se está viendo la luz al final del túnel. El 5 de abril está previsto que se levanten las la restricciones que obligaban al cierre de negocios a las 23h. en casinos, salas de cine, billares, gimnasios y centros deportivos. Aunque estas restricciones continuarán en locales de hostelería y las 24h para eventos o banquetes.
Por otro lado y después de un año de críticas por parte de expertos en salud, y duras críticas de los rivales políticos, entre otros, el gobernador de Florida, DeSantis, se mantiene en primer nivel de popularidad entre los gobernadores de la nación en la primera línea de la lucha contra el coronavirus. Según sus propias palabras: «Todos me dijeron que estaba equivocado», dijo DeSantis, un republicano, en un llamamiento de recaudación de fondos el martes, llamando la atención sobre su desafío a la pandemia. «Me enfrenté a la presión continua de los demócratas radicales y los medios liberales, pero me negué a dar marcha atrás. Está claro: Florida lo hizo bien». Mientras muchas partes del país se embarcan en una incómoda marcha hacia la normalidad, Florida no solo ha vuelto al negocio, sino que ha estado activo durante la mayor parte del año pasado. La apuesta de DeSantis de adoptar un enfoque de laissez faire parece estar dando sus frutos, al menos políticamente, al menos por ahora, ya que otros gobernadores que captan la atención en la fase inicial de la pandemia ahora enfrentan desafíos más pronunciados.
A pesar de muchas menos reglas y restricciones, Florida se ubica casi en el medio de todos los estados en una variedad de métricas de coronavirus. El estado ha tenido aproximadamente un 3% más de casos de Covid-19 per cápita que los EE. UU. En general, pero aproximadamente un 8% menos de muertes per cápita. La tasa de mortalidad per cápita del estado ocupa el puesto 24 en la nación. DeSantis ha declarado que los cierres no han funcionado y le han hecho un gran daño a su país. También indicó: «Nunca podemos permitir que algo como esto vuelva a suceder. Florida tomó un camino diferente. Como resultado, hemos tenido más éxito«.
