Llegado este momento, con la experiencia acumulada, pienso que es el momento. Cierto es que llevo muchos años en el sector, que estudié mi carrera universitaria en finanzas y después, he perdido la cuenta de los master y formaciones regladas que llevo realizadas a lo largo y ancho de los años de profesión. Por no decir de las horas dedicadas a informarme de las últimas novedades y desarrollos de nuestro amado sector, siempre en punta de lanza. Ya se sabe, queremos aplicar allí donde trabajamos el último estudio o el último modelo de gestión. Y es que, formas y ejemplos de casos de éxito hay tantos como empresas hay en el sector, así que, ¿por qué no podré tener mi propio modelo de negocio?

Y, ¿Cómo lo hago, me establezco por mi cuenta? ¿Lo hago bajo el paraguas de una marca? Es sabido que ambas opciones tienen sus grandes ventajas y porque no, sus inconvenientes. Por un lado, el contar con soporte de una marca lleva consigo ventajas innegables como unirse a una marca que ya lleva tiempo en el sector y tiene un recorrido reconocido; que cuenta con un equipo profesional que te va ayudar en la elección de la ubicación y el local, así como en el proyecto, licencias, y demás asuntos legales; que por supuesto cuenta con un equipo muy profesional que va a prestar un apoyo continuo y soporte en formación, marketing, desarrollo de producto, proveedores, etc…

Antes de plantearme de verdad “montarme por mi cuenta”, quiero hacer alguna reflexión a cerca de ¿cuántos responsables de empresa no llegan a todo lo que tienen que decidir? La respuesta es la mayoría de ellos. Casi todos tenemos este problema hoy en día. Y es que el rendimiento ágil no está en las herramientas que utilizamos para decidir, sino en los sistemas de trabajo que creamos con nuestros equipos.

Durante una competición, estás tomando decisiones para intentar que tus acciones sean mejores que las de tu rival. Tienes un nivel de tensión muy elevado y aumenta aún más con el resultado que vas obteniendo en cada una de dichas decisiones que vas tomando. Además, te van juzgando continuamente, no sólo tus compañeros, que también son juzgados, sino el staff técnico, que también es juzgado, tus seguidores también, lo cual aumenta todavía más la repercusión de tus decisiones y tu propio estrés. ¡Tienes que ser ágil con tu rendimiento si quieres sobrevivir a esta situación con éxito!

Pienso ahora en mi negocio. ¿Cuántas veces he sido ágil en mi competición? Tomo decisiones cada día y a veces, tienen resultados inmediatos y otras no. Cuando tengo resultados inmediatos tengo que exigirme mejorarlos y cuando no los tengo, debo supervisar cada posible pista de lo que puede ocurrir tras esa decisión de la que no tendré información hasta dentro de un tiempo. Si no hago esto, pierdo agilidad en mi rendimiento y mi rival, que sí está controlando sus resultados y la información continua que arroja su negocio, estará más listo que yo para posicionarse en mi sector. Básicamente, porque pertenece atento a la jugada, dure el tiempo que dure.

No es una cuestión de planificación del tiempo, el tiempo ya no tiene hueco para ser planificado, lo que tiene es que ser aprovechado con decisiones que generen resultados rápidos y apoyadas en los profesionales, que deben estar, obligatoriamente, alineados conmigo. No puedo pensar para rendir, tengo que rendir para pensar. Es una estrategia con orientación ofensiva-defensiva, mientras estoy rindiendo ya estoy tomando (pensando) la siguiente decisión para seguir con agilidad hacia mis resultados.

Ahora ya sí me he decidido a hacerlo solo, e inclusive a por qué no, a sentar las bases de una estructura de equipo de trabajo multidisciplinar, algo que también tiene su potencial atractivo para aquellos que tienen su modelo de negocio lo suficientemente claro, que conocen o pueden conocer, con el debido asesoramiento laboral y fiscal la forma en la que establecerse y deciden dar el paso. Así mismo, saben el lugar dónde deben situar su centro porque ya cuentan con clientela o saben de las bondades de la zona o potencialidad de la misma en plazo.

En ese punto, desean materializar las preguntas: ¿por qué la gente va a querer engancharse a entrenar en mi centro?; ¿qué es entrenar en mi centro?; ¿qué tipo de entrenamiento debe esperar el cliente?; ¿necesita tener experiencia previa antes de entrenar con nosotros?; y ¿cuál es el resultado objetivo al que quiere llegar?

Me planteo qué será lo más importante para que mi centro sea un éxito, sé que debo tener un buen plan de marketing, que he de tener unas redes sociales dinámicas y atractivas que comuniquen con suficiente claridad lo que dentro hacemos y hacemos mejor que la competencia, y además nuestros clientes van a compartir su experiencia en sus propias redes!; en ellas etiquetaremos tips de relevancia en el sector y en nuestra zona de influencia para elevar nuestra notoriedad. También he empezado a escribir post como invitado en publicaciones relevantes del sector con muchos seguidores, esto pinta bien! Además, he empezado a colaborar con algunas organizaciones sin ánimo de lucro de mi zona de influencia que me han recomendado algunos de mis mejores clientes, por lo que vamos a dar a nuestro centro mucha visibilidad.

Nuestro proceso de venta no es demasiado complicado, pero sí le hemos dedicado muchas horas de vueltas a la cabeza para poder llegar a tener un producto muy elaborado y fácil de transmitir por cualquier profesional que esté o comience a trabajar con el equipo. Se basa en que pensamos en eso mismo, en mentalidad de grupo, de organización, y en no esperar a que vengan clientes, sino a buscar aquellos que pueden serlo. Observamos, medimos, y ofrecemos pruebas piloto a medida por segmentos. No quiero decir que “entren solos”, pero el camino es menos duro que si esperamos a que entren solos.

Aquellos que finalmente acuden, se interesan y prueban…ya son nuestros!, son nuestro mayor tesoro y nuestra mayor motivación es mimarlos, acogerlos y conservarlos. Los seguiremos hasta que mejoren y esto, como sabéis, no tiene fin. La prueba es nuestro talismán, es el mayor indicador de nuestro saber hacer. Mucho nos estamos equivocando si de esa prueba no sale un contrato de entrenamiento, porque la aventura, para el cliente, y para nosotros, ya ha empezado!

Rafael Granados (Málaga),
Gerente Fidias Health Center Vélez Málaga.
Trainer en MindCompany Sport, rendimiento de equipos»

Equipo Management Fitness Solutions

Francisco Javier Fernández (Elche), Gerente Centros Domo Personal (Elche, Orihuela, Murcia).

Daniel Cavanillas (Barcelona), Director Operativo de l’Esportiu de Llinars (Claror)

Raquel Jiménez Martínez (Barcelona), Directora AECD y Coordinadora Cursos Gestión Deportiva FEDA Barcelona.

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