La prevalencia del sobrepeso y la obesidad en los niños y niñas europeos es alarmante y los porcentajes en España están en aumento, situándose cerca de un 18% de la población total en menores de doce años. Es por ello que el equipo técnico de la marca de equipamiento Aerobic&Fitness ha decidido promover una serie de actividades que ayuden a un sano desarrollo físico y mental de las nuevas generaciones, que ayude, además, a adquirir hábitos de vida saludables para el resto de su vida. Y a partir de la próxima temporada, ofrecerán en sus redes sociales una serie de consejos para trabajar con pequeño material deportivo.
Es de sentido común que la clave para un niño/a sano implica una cantidad sustancial de ejercicio físico, los niños lo hacen saltando y jugando de manera natural. Sin embargo las nuevas tecnologías y el nuevo estilo de vida han hecho que esto se vea afectado y que necesiten una dosis extra de entrenamiento que mezcle fuerza y resistencia.
Para María Olivé, directora técnica de la marca, “El desarrollo de los niños a través del entrenamiento de la fuerza y ejercicio aeróbico a través de pequeño equipamiento e incluso con pesas se pensaba que era peligroso, pero con cuidado y supervisión, es extremadamente beneficioso para los niños». No solo es beneficioso para ellos en el momento en que lo agregan a su rutina diaria, pero de acuerdo con el entrenamiento de resistencia para niños: desde el principio, los niños que están expuestos a la resistencia tienen una mayor densidad mineral ósea, mejoran los factores de riesgo cardiovascular y facilitan el control de peso. Además, el entrenamiento de resistencia construye una base para el resto de sus vidas activas y evitarán adultos sedentarios.
Pequeño material de entrenamiento como mancuernas de 1 kg hasta 2 kg puede ayudar a tonificar los músculos y acostumbrará a los más pequeños a entrenar de forma inteligente de una forma gradual. De acuerdo al estudio ‘Resistance Training for Kids: Right from the Start’, de la American College of Sports Medicine (ACSM), los niños que comienzan a ejercitarse para mejorar el desarrollo muscular durante la infancia se beneficiarán de la mejora del rendimiento y la prevención de lesiones durante la adolescencia y es probable que continúen desarrollando hábitos saludables a lo largo de toda su vida adulta.