¿Y si fuera posible tomarse un año sabático? ¿Y si pudieras descansar y disfrutar mientras trabajas? ¿Y si tuvieras la opción de convertir tu trabajo en tragozo?

Este artículo quiero que lo utilices para darte cuenta de aquellas cosas que limitan y dificultan tu energía y capacidad de gestionar de la mejor manera, para que descubras algún nuevo objetivo que mejore y te permita disfrutar de esa gestión de tu Vida/Empresa.

Pues esas cosas que no te hacen bien y te roban la paz y la felicidad, son más internas que externas y uno las lleva encima vaya donde vaya y esté donde esté.  Me he visto muchas veces en la tumbona frente al mar de vacaciones, pero con la mente cargada de pensamientos negativos y miedos que no me permitían disfrutar ni del entorno ni de la compañía, por eso siento que es cuestión de buenos hábitos y buena actitud, para disfrutar del “cielo aquí en la tierra”.

Todos asociamos la felicidad a esa experiencia de un año sabático. Para mí un año sabático equivaldría a estar 365 días sintiendo paz, con silencio mental, con mas valor que miedo, con esa sensación de plenitud y felicidad en el pecho que experimentamos en momentos puntuales. Disfrutar de esas sensaciones que conviertan mi día a día y mi trabajo en tragozo (trabajo y gozo), que me permita disfrutar de lo que hago, sentirme descansado, contento y disfrutando de mi único y verdadero propósito de vida, que no es otro que estar bien en este preciso momento, justo ahora, donde sucede la vida.

Y llamo el “cielo aquí en la tierra” a bailar como si nadie nos estuviera mirando, amar como si nunca nos hubieran herido, cantar como si nadie nos estuviera escuchando y vivir intensamente y con mayúsculas, porque la vida es tan valiosa que no debemos perderla. Y la vida se pierde, cuando quieres vivir la vida de otros y no la tuya, criticamos los errores de otros y no mejoramos los nuestros, cuando nos lamentamos a cada momento por haber fracasado y no buscamos soluciones para poder triunfar, cuando nos enfocamos en las cosas negativas y dejamos de disfrutar de las buenas, la vida no se pierde cuando dejas de respirar sino cuando dejas de ser feliz.

Todos asociamos la felicidad a esa experiencia de un año sabático.  Para mí un año sabático equivaldría a estar 365 días sintiendo paz, con silencio mental, con mas valor que miedo, con esa sensación de plenitud y felicidad en el pecho que experimentamos en momentos puntuales.

Disfrutar de esas sensaciones que conviertan mi día a día y mi trabajo en tragozo (trabajo y gozo), que me permita disfrutar de lo que hago, sentirme descansado, contento y disfrutando de mi único y verdadero propósito de vida, que no es otro que estar bien en este preciso momento, justo ahora, donde sucede la vida.

Te voy a enumerar aquellas cosas que para mí, serían como tomarme un año sabático, sin  necesidad de dejar de trabajar y sin estar en un sitio paradisiaco, sin hacer nada.

Para mí un año sabático es…

  • Ser consciente para estar constantemente mirando a mi alrededor y disfrutar de lo afortunado que soy, por contar con esas muchas cosas que no puede comprar el dinero (amigos, familia, salud, amor, etc…) y sentir la felicidad de estar vivo.
  • Valorarme por lo valiente que he sido, soy y seré (a pesar del miedo), por haberme hecho empresario, por haber salido de mi zona de confort, que no es más que ese hermoso lugar donde nada crece y permitirme desarrollarme como persona de forma intensa y acelerada.
  • Tener claro que lo mejor de este proceso es que no dejo de aprender constantemente y en la persona en la que me estoy convirtiendo en el camino hacia el éxito
  • No desesperar cuando aparentemente todo se ponga en mi contra, recordando que la vida nos apoya, que esta de nuestra parte, tanto cuando lo aparenta como cuando no.
  • Aceptar cada circunstancia que aparece en mi proceso como un aprendizaje, pudiéndome adaptar a cada una de ellas y seguir adelante hacia mi objetivo.
  • Saber que en la vida no podemos valorar algo sin su opuesto, debemos experimentar todo, que todo tiene su sentido y es para nuestro máximo beneficio. La Vida usa el silencio, para que valoremos la palabra; la soledad, para enseñarnos a convivir; el aburrimiento, para realzar la aventura.
  • Recordad en cada instante porque lo hice, porque me lancé a emprender, porque no me doblegué a las recomendaciones conservadoras de los que me rodeaban, porque decidí dejar lo “aparentemente” seguro, la “hipotética” comodidad de trabajar por cuenta ajena, lo hice para sentir emociones mucho más agradables y positivas, lo hice para sentir más abundancia, para sentirme libre y realizado, para tener más tiempo libre y disfrutar de los que amo.

Si yo sintiera y viviera cada día esas cosas por las que me lancé a vivir esta vida de gestionar mi vida/empresa, para mí ya sería estar viviendo un año sabático.

Tomarnos un año sabático sin dejar de trabajar es parar el coco, dejar de preocuparnos, de pensar en negativo, de tener miedo, ser capaz de disfrutar de la incertidumbre, sentirnos abundantes y protegidos, es tener una ilusión cada mañana al despertarnos y dar las gracias por estar vivos.

Alonso Pulido

Speaker Internacional miembro de la Red Mundial de Conferecistas. Creador y Director de Ahumor – Formando Maestros y Empresarios con Corazón. Autor del libro «Amor y Humor en la Educación».

Etiquetas:
0 veces compartido
Post anterior

Precor presenta la nueva consola P31

Siguiente post

Macrofit abre en La Laguna su primer centro en Tenerife